domingo, 15 de marzo de 2009

EL AYUNO



AYUNO, AYUNAR

Llamamos "ayuno" (latín "ieunium") a la privación voluntaria de comida durante algún tiempo por motivo religioso, como acto de culto ante Dios.

En la Biblia el ayuno puede ser señal de penitencia, expiación de los pecados, oración intensa o voluntad firme de conseguir algo. Otras veces, como en los cuarenta días de Moisés en el monte o de Elías en el desierto o de Jesús antes de empezar su misión, subraya la preparación intensa para un acontecimiento importante.

El ayuno Eucarístico tiene una tradición milenaria; como preparación a este sacramento, el feligrés se abstiene antes de otros alimentos.

Es en Cuaresma, desde el siglo IV, cuando más sentido ha tenido siempre para los cristianos el ayuno como privación voluntaria de la que existen en otras culturas y religiosas por motivos religiosos. El ayuno junto con las oración y la caridad, ha sido desde muy antiguo una "practica cuaresmal" como signo de la conversión interior a los valores fundamentales del evangelio de Cristo.

Actualmente nos abstenemos de carne todos los viernes de Cuaresma que no coincidan con alguna solemnidad; hacemos abstinencia y además ayuno (una sola comida al día) el miércoles de ceniza y el Viernes Santo.



Ayunar es abstenerse de alimentos y en unos casos de líquidos, sueño, etc., para darle prioridad a este ejercicio espiritual (Ex 34:28; De 9:18; Hch 27:33). El ayuno puede ir acompañado de oración (Sal 35:13) o por voto (1 S 14:24–30). Jesús enseñó que el ayuno para ser exhibido externamente no tiene valor espiritual; y que al contrario, muestra el pecado de hipocresía (Mt 6:16–18).

1 comentario:

  1. Felicitaciones Jaime que lindo es saber que personas como tu nos llenan de Paz y nos acercan a nuestro Jesús...Yo tuve la grandiosa experiencia en uno de tus encuentros y fue hermosisimo sentir la clara presencia del Señor en mi vida...Bendiciones y te quiero mucho....con cariño ...Aida Azua

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